por H. Alfonso Pérez Larios, M.Sp.S. (29)
Septiembre 2024
Continuación…
RELACIONES FAMILIARES
A fines de 1926, cuando el Padre Félix envió a Alfonso a la fundación de Roma, fue a despedirse de sus seis hermanos, a tres de los cuales no volvería a ver pues morirían durante su ausencia: Leonardo, quien recibió la palma del martirio en San Joaquín, León, Guanajuato, el 24 de abril de 1927; otro de sus hermanos, cuyo nombre no conocemos, que falleció el 24 de enero de 1929 y, finalmente María del Refugio, murió el 27 de junio de 1934, poco antes de que Alfonso regresara de Roma.
La familia Pérez Larios durante estos ocho años en que Alfonso vivió en Roma, además de la reducción del número de sus miembros, sufrió otros importantes cambios debido a la revolución, a la persecución religiosa y a las guerras que se multiplicaron en el territorio nacional.
En efecto, la situación financiera de la familia Pérez Larios cambió totalmente, no contaban ya con las valiosas aportaciones económicas de Leonardo, además, Manuel perdió su trabajo y por lo que sabemos a través de la correspondencia del Hermano Alfonso con el P. Félix Rougier Félix, se sostenían únicamente con las fluctuantes ganancias que les llegaban por el trabajo de Agustín.
Esta crisis afectó particularmente a las dos mujeres de la familia: María del Refugio y Guadalupe, ymás a esta última después de que María del Refugio falleció. Para Alfonso, recién llegado de Europa, esto constituyó una preocupación, que el P. Félix compartió con él y generosamente ayudó a la familia. Posteriormente hicieron lo mismo los distintos superiores de Alfonso a lo largo de su vida. Él, por su parte, nunca se quejó de esto, ni se mostró exigente ni desconfiado.
Continuará…
