5 de julio de 2024

Es momento de ser joven ¿Qué pasa cuando se encuentran el ruido y el silencio?

¿Qué pasa cuando se encuentran el ruido y el silencio? ¿El ruido cesa o el silencio empieza a escucharse? Tal vez, podríamos darnos cuenta de que, en el silencio, siempre hay ruido y, en el ruido, siempre hay silencio. Quizá, entenderíamos que, muchas veces, el ruido está vacío y el silencio lleno.  

Cuando era chica e iba a la playa, mi mamá me llevaba a una colina y me hacía quedarme callada, escuchando lo que, para mí, parecía imposible de escuchar. Pensaba, ¿cómo puedes escuchar algo que no hace ruido? Para una niña de diez años, escuchar el silencio era lo más aburrido que podías hacer. El silencio sonaba tedioso, obscuro, frío, incluso, hasta podía llegar a dar miedo.  

Mi mamá intentaba enseñarnos a disfrutarlo y apreciarlo, aunque siempre nos quejábamos y hacíamos ruido, a propósito. Hoy, le agradezco esos momentos, porque aprendí que, incluso en el silencio, hay ruido y saber escucharlo es una gran habilidad.  

Vivimos en un mundo en donde pensamos que el silencio y el ruido están peleados, pero lo cierto es que los dos son diferentes e iguales al mismo tiempo. Trabajan separados, pero unidos, porque, cuando cada uno se escucha, ninguno de los dos pierde significado. 

El problema es que los hemos etiquetado como cosas opuestas y nos hemos privado de poder entenderlos. Al silencio, como algo malo, incómodo y callado; por esto, no podemos escuchar lo que nos quiere decir. Al ruido, lo hemos etiquetado como un sonido fuerte y lleno de significado que, cuando está vacío, nos empeñamos en escuchar lo que en realidad no existe. 

No tenemos que aprender a callar, sino aprender a escuchar, porque es así cuando puedes captar todo lo que hay, apreciar el silencio, entender lo que dice; cuando aprendes a escuchar el ruido, aprendes a distinguir cuándo está vacío.  

En una conversación, en una situación importante, o en un espacio de tranquilidad, saber escuchar el silencio y no poner siempre atención al ruido puede ayudarte a ver otros panoramas y entender mejor lo que está sucediendo a tu alrededor.  

Lo cierto es que, si todos intentáramos escuchar el silencio, si todos supiéramos cuándo vale y cuándo no vale la pena escuchar el ruido, la historia sería otra. Porque muchas veces nos perdemos de cosas que se encuentran en el silencio. 

Ahora voy a esa colina, feliz, intentando entender el significado del ruido y del silencio, animando a otros a que lo intenten. Porque, cuando el ruido y el silencio se encuentran, no es que el ruido cese, ni el silencio empiece a escucharse, sino que simplemente trabajan en armonía para que ninguno de los dos pierda su significado. 

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