8 de julio de 2024

Así se las gasta

Dedicado a mi amiga, Claudia Gonzáles Iñárritu 

Desde hace tiempo, mi querida amiga me ha propuesto escribir sobre una cita que escuchó, alguna vez, por parte de mi madre y porque, además, se apreciaban mutuamente. 

Pues, justo ahora, cuando me siento un poco desorientada y no solo con respecto a lo que quiero compartir escribiendo, sino también en relación a algunos aspectos de mi vida en general, retomo esta frase, que me produce varios sentimientos: en principio, risa – debo confesar – seguida de respeto y de admiración, reconociendo cómo magistralmente, con profunda astucia y sabiduría, nos inclina siempre a voltear hacia Él. 

Porque sabemos y queremos agradecer todos los días las bendiciones que tenemos, las que vemos y las que no vemos, incluyendo aquellos eventos desafortunados que nos ocurren y para los cuales, afortunadamente, encontramos una salida que nos reconforta y nos regresa a agradecer. Así es como: “Dios siempre se las arregla para que le acabemos dando las gracias”

Sí, aunque nos cueste, aunque tardemos, aunque se lleve tiempo, siempre terminamos dándole las gracias, como popularmente se dice, “así se las gasta”. 

Porque: 

– Me robaron la bolsa, pero, gracias a Dios, no traía mi cartera… 

– Me enfermé, pero, gracias a Dios, no pasó a mayores… 

– Me quedé sin chamba, pero, gracias a Dios, encontré una mejor propuesta… 

– Recibí esta mala noticia, pero, gracias a Dios, estoy a tiempo de solucionarlo… 

Y, así sucesivamente, nos podríamos pasar todo el día, repitiendo ejemplos “desafortunadamente chuscos”, hasta algunos más serios, que me reservo porque, evidentemente, merecen respeto. 

Lo anterior no significa justificar o agradecer situaciones lamentables y que van más allá de nuestro propio entendimiento; la intención está en resaltar nuestra enorme capacidad de resiliencia ante la adversidad, misma que también forma parte de nuestra cultura siempre optimista. 

Y pues no se me ocurría qué escribir en esta ocasión, pero… 

¡Gracias a Dios, mi amiga Claudia me insistió y me recordó esa frase para poder compartirles hoy este artículo! 

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