por Un defecto que tenía Teresa de María era adelantarse a los acontecimientos[1]. Nuestra mente es capaz de imaginar un futuro a la medida de nuestros más profundos temores o de nuestras más infantiles fantasías.
Con fino sentido del humor –poniéndole un apodo–, Concepción Cabrera exhorta a su hija a corregir ese defecto: «Ah qué doña PORVENIRES, que se adelanta las cosas y ve y se aflige y se revuelve, y llora, y ojo colorado, y angustia, etcétera, de lo que podrá ser y ni sabe si será»[2]. Con otro apodo, le propone el remedio; le anuncia que irá a visitarla, y le dice: «A ver si te encuentro doña Presente y no Porvenir»[3].
Ser doña Presente significa superar la tentación de volver al pasado o de huir al futuro: «prosigue tu camino sacrificándote sin medir lo que has andado, ni adelantarte el porvenir»[4]. «No pensar en el futuro ni en el pasado, que ya Dios le echó un velo y todo lo perdonó. Vivir del presente, y se acabó»[5].
San Pablo exhortaba a los corintios a vivir y aprovechar el presente con esta afirmación: «ahora es el tiempo propicio; hoy es el día de salvación» (2Co 6,2).
Con frecuencia, esa profetisa mexicana usa una expresión muy suya: vivir al día. La encontramos desde la primera carta que le escribe, en 1906, cuando su hija aún vivía en la casa materna: «Vive al día. Sé fiel, y Jesús NUNCA te faltará»[6]. En 1909, cuando ya está con las Religiosas de la Cruz: «¡Qué adelantos a lo que no sabes si llegará! Ya te estás apurando de lo de Tlalpan, etcétera, vive al día: y lo que Dios quiera, abandónate totalmente a su voluntad […] y el Espíritu Santo te dará fuerzas y mucho más: ¡qué poca fe!»[7] En 1919: «Vive al día y no al porvenir, que es de Dios»[8]. En 1922: «Hazte santa, aprovéchate de los medios que Dios te pone, vive al día, no pienses en el futuro, hoy, hoy, y ya»[9].
Tomado del libro: F. Torre, Con todo el fuego de tu corazón, La Cruz, México 2021.
[1] Cf. Cartas a Teresa de María, México 1989, 268, 338, 340, 343, 382, 444, 490.
[2] Carta escrita el 9 agosto 1920, en Cartas a Teresa de María, México 1989, 296.
[3] Carta escrita el 12 julio 1919, en Cartas a Teresa de María, México 1989, 278.
[4] Carta escrita el 11 noviembre 1912, en Cartas a Teresa de María, México 1989, 163.
[5] Carta escrita el 26 mayo 1923, en Cartas a Teresa de María, México 1989, 388.
[6] Carta escrita el 6 enero 1906, en Cartas a Teresa de María, México 1989, 8.
[7] Carta escrita probablemente en 1909, en Cartas a Teresa de María, México 1989, 56.
[8] Carta escrita posiblemente en junio 1919, en Cartas a Teresa de María, México 1989, 274.
[9] Carta escrita probablemente en 1922, en Cartas a Teresa de María, México 1989, 372.
