8 de julio de 2024

¿Justicia o linchamiento provocado?

Francisco nos dice que, a lo largo de la historia, han existido infinidad de mártires, que han sido asesinados, debido a habladurías, noticias falsas, calumnias que instigan al pueblo, pidiendo justicia. Partir de falsos testimonios es algo inconcebible, un verdadero linchamiento.

Frente a esta avalancha de falsas noticias, que crean opinión, muchas veces no se puede hacer nada. Así, el Papa nos comparte varios sucesos que marcan este ejemplo.

Es el caso de Pilatos que, sabiendo claramente que Jesús era inocente, al ver a la multitud, se lavó las manos (cf. Mt 27,24-26). Previamente, convencieron al pueblo que Jesús era un blasfemo y lo crucificaron.

San Esteban fue el primer mártir, murió a pedradas. Los doctores de la ley, a través de falsos testimonios, que afirmaban que lo habían oído blasfemar contra Dios y contra la Ley (cf. Hch 6,11-14), lograron deshacerse de él.

En la Biblia, vemos varios casos, como el de Susana (cf. Dn 13,1-64), de Nabot (cf. 1Re 21,1-16); luego, Amán trató de hacer lo mismo con el pueblo de Dios (cf. Est 3, 1-14).

Esto lo vemos en algunos países, cuando se quiere dar un golpe de estado o “eliminar” a algún político para que no se presente a las elecciones: noticias falsas, calumnias; después, se le encarga a un juez que lo condene.

Así sucede con los mártires de hoy: Un linchamiento social, los jueces no tienen la posibilidad de hacer justicia, porque los acusados ya han sido juzgados, expresó.

En Asia, Bibi estuvo diez años en prisión, al ser juzgada por una calumnia y un pueblo que quería su muerte. La Shoah, exterminio judío, una opinión en contra de un pueblo para eliminarlos.

Lo que no nos damos cuenta es que, diariamente, hay pequeños linchamientos: con nuestros comentarios, al intentar condenar a las personas, crear una mala reputación, descartarlas…

El Papa nos invita a orar, para que el Señor nos ayude a ser justos en nuestros juicios, a no empezar o continuar esta condena masiva que provocan las habladurías.

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