por Me preguntaba una persona:
“¿Qué le puedo decir a una señora que vive en una ranchería muy pobre y está muy contenta con este presidente porque es el único presidente que le ha dado dinero a los viejitos y es el único que le ha dado becas a los muchachos para que estudien; eso es lo que ella ve, eso es lo que ella sabe y para ella esa es LA realidad? ¿Cómo le puedo explicar a ella, que no le interesa si hay un aeropuerto bueno o malo, no le interesa que al mismo tiempo se esté militarizando el país y se deje vía libre a los carteles de la droga, no le interesa saber de refinerías, no sabe lo que es eso y menos lo de las energías limpias, no entiende si hay un tren maya o no (está “re-lejos”), o inclusive lo que es la corrupción (en general el concepto lo conoce) pero del equipo de este “cuate” ni le va ni le viene, no le interesa si se pierde la independencia de poderes, al contrario, que bueno que el presidente tenga todo el poder? ¿¡Cómo le explico!?”
Como ciudadano y como simple párroco creo que el punto no sólo es “¿Cómo le explico?” sino también: ¿Cómo me explico a mí su posición? ¿Cómo me explico mí posición? Para poder tener una comprensión más amplia y poder tomar una decisión mejor para el país.
Me parece que lo primero que tenemos que hacer es poder VER, ver lo que los otros ven, ver desde su realidad actual pero también la pasada y la posible futura. Para poder hacer un voto libre tenemos que estar informados, pero no por los anuncios políticos de la T.V., radio o espectaculares, ya que todos dicen más o menos lo mismo, sólo que cada cual atacando a los respectivos contrincantes políticos. Tenemos que estar informados, por los analistas de diferentes colores, pero sobre todo escuchando y viendo por los oídos y ojos de las demás personas, de las que piensan como yo y de las que piensan desde otra perspectiva; intentado tocar su realidad, su dolor, su historia, sus esperanzas o decepciones. Todos somos mexicanos, la realidad de cada persona (la mía, la tuya y la de las otras personas) desde la cual ve la realidad es igualmente respetable y valiosa, todos somos responsables de lo que está pasando y de lo que pueda pasar o dejar de pasar en México.
Tenemos que hacer un voto libre, informado y responsable; lo contrario sería escandaloso: no participar, votar por tal o cual por haber recibido una dádiva (regalito), votar pensando sólo en mis intereses, votar porque el grupo así lo decide… repito, sería escandaloso, indigno, irresponsable y denigrante…
Perdón, UNA ACLARACIÓN, no sólo me estoy refiriendo a las votaciones del 6 de junio, me refiero al ausentismo y a los votos de los diputados y senadores, a las decisiones de los gobernadores y todas las autoridades que elegiremos ese día, que desgraciadamente hay la sensación de que una vez “en el poder” (debería ser “en el servicio”) emiten sus votos y toman sus decisiones por haber recibido una dádiva (regalote), o pensando en sus intereses privados, o porque el partido así lo ordena…¡Eso sería escandaloso!, sería perder la libertad, la dignidad, y la confianza que el pueblo les daremos este 6 de junio.
